Una tabla de queso, un buen vino y ¡a disfrutar! Es uno de nuestros planes favoritos, de fin de semana o de una tarde cualquiera al salir de trabajar. Pero, ¿por qué maridar el queso sólo con vino? Tenemos cinco maridajes con queso a los que no vas a poder decir que no.

El queso es el protagonista de nuestro día a día, desayuno, comida y cena. Es como ese abrigo favorito, que te pones cuando empieza el frío y no quieres quitártelo porque combina con todo.

Así pasa con el queso, es para el fin de semana y para los días de diario. Para unas tostadas en el desayuno o de postre; porque es como el abrigo del que hablábamos que queda siempre bien.

Desayunos con queso

Y tomarlo sólo está muy bien, pero a nosotros nos gusta más hacerlo en compañía. Eso sí, si elegimos acompañante para nosotros, para el queso también, porque dos es mejor que uno. ¿no os parece?

Hay infinidad de maridajes con queso, puede ser una bebida, una fruta, dulce o frutos secos…. Hoy os traemos cinco combinaciones que harán la pareja perfecta con el queso. Sólo tienes que elegir, cuál es tu media naranja.

Casi siempre hablamos de vino, pero hay otras bebidas con las que podemos maridar el queso, la  cerveza, que casa de manera especial ya que son dos elaboraciones fermentadas que pueden tener en común levaduras, aromas, matices. Para que un alimento no mate el sabor del otro, elige bien, un queso tierno debe estar acompañado por una cerveza no muy fuerte. Cuanto mayor sea la curación del queso, más fuerte puede ser la cerveza.

El vermut es perfecto para los quesos con personalidad, de sabor fuerte. Si eres de vermut rosado un domingo por la mañana, te recomendamos un queso azul; si eres más de vermut blanco los quesos de cabra son los idóneos para ello.

Si sois adictos a los frutos secos, casi todos o todos son buenos maridajes con queso, las nueces son las más utilizadas. Pero hemos encontrado una opción que nos gusta un poquito más: los piñones, puedes utilizarlos en una tabla de queso, para hacer una ensalada o un risotto.

Uvas, manzanas, fresas, las frutas son un buen acompañamiento para el queso. Es la opción para los que más cuidan su alimentación. Os recomendamos que probéis como maridaje los higos, el sabor dulce, es ideal para los quesos semicurados o curados.

Fruta para maridar con queso

Y por último, al queso le va genial un poquito de dulce, los más golosos, seguro estabais leyendo esperando este momento. El membrillo, un clásico. El elegido de siempre, así como pasa con el vino. El toque dulce, que combina con los quesos más tiernos.

Y aunque, quizás no hubierais pensando en el chocolate, para comerlo con el queso, os animamos a que lo probéis. Puedes rallar un poquito de chocolate negro encima de tu tabla de queso… y ¡a disfrutar!

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