Es una fruta originaria de China y Japón. El caqui tiene un sabor dulce, es de color naranja o rojizo con una pulpa muy carnosa. El caqui es una de las más espectaculares y preciadas frutas de temporada del otoño.
Este año ha sido muy bueno para el caqui, ya que los árboles han presentado una importante producción. Los caquis los hay de diferentes tamaños, más grandes y más pequeños, igualmente esquistos ambos, aunque mucha gente se decanta por los más pequeños, ya que al parecer su sabor es algo más dulce.
El cultivo del caqui se remonta al siglo VIII en China y Japón y llegó a principios del siglo XIX a Estados Unidos y aproximadamente en 1870 a España. Actualmente los principales productores mundiales son China, Japón, Brasil y también Israel.
Su piel es muy delicada, lo que dificulta su manipulación y lo convierte en un fruto muy sensible a adversidades climatológicas como las heladas o el granizo. Las características principales son:
Color: Piel semiadherente y de grosor medio, con color amarillo anaranjado en la recolección y rojo intenso al madurar.
Gusto: Dulce en la madurez y muy astringente (abundancia de taninos) antes de alcanzarla, salvo que se someta a un tratamiento desastringente.
Pulpa: De tacto consistente y color naranja rojizo en la recolección. En la madurez se caracteriza por un color rojo intenso y pulpa acuosa.
Forma: De sección transversal redondeada y ligeramente alargado en la sección longitudinal.
Los caquis se pueden consumir de dos formas diferentes:
El normal de pulpa blanda. Se recolecta maduro con una textura blanda que hace que se coma con cucharilla.
Y el «Persimon», es el de la pulpa dura. «Persimon» es el nombre que reciben los frutos tras ser sometidos a un tratamiento en almacén, por el que se elimina la astringencia, permitiendo ser consumido con cuchillo y tenedor. Dicho proceso consiste en recolectar los frutos aún sin madurar y conservarlos en torno a 20 °C entre 2 y 4 días en cámaras con una atmósfera controlada. Presenta un color anaranjado y su textura es más firme, permitiendo su comercialización y exportación. En el mercado suelen aparecer a mediados del mes de octubre.
El caqui es una fruta que podemos comer al natural sola o utilizar en recetas de cocina de postres y dulces como gelatina, helados, puding, salsas, tartas, batidos, de relleno en empanadillas dulces, en tartaletas, etc.
El caqui es una fruta que contiene un 80% de agua, después el macronutriente con mayor presencia son los carbohidratos, sigue la proteína vegetal y por último tiene cantidades mínimas de grasa.
El caqui además nos aporta fibra soluble con la pectina y los mucílagos. También posee taninos que tienen efecto astringente, pero a medida que madura el fruto se van perdiendo.
El valor calórico del caqui es de 65 kcal por cada 100 gramos de fruta.
Propiedades y beneficios del consumo de caqui
Su aporte en antioxidantes mejora nuestras defensas naturales.
El caqui nos ayuda a combatir el estreñimiento y mejora el tránsito intestinal debido al efecto laxante del fruto cuando está maduro.
Por su contenido en potasio, es una fruta beneficiosa para personas con hipertensión arterial.
El caqui aumenta la absorción del hierro, contribuyendo a la prevención o disminución de la anemia ferropénica.
Cuida de tu sistema cardiovascular con el caqui.
La fibra del caqui ayuda a reducir los niveles de colesterol.
Esta fruta nos aporta excelentes cantidades de betacarotenos, que se convierten en vitamina A en nuestro organismo y participa en multitud de funciones: en el sistema inmunológico, cuida de nuestra vista, mantiene nuestro cabello y piel en buen estado. Además su contenido en vitamina C favorece la formación de colágeno.
La vitamina A del caqui es muy beneficiosa para mantener unos huesos y dientes fuertes, por lo que es una fruta estupenda especialmente durante las etapas de crecimiento.
Independientemente de cualquier otra valoración nutricional el caqui es una de las frutas más exquisitas que podemos servir en nuestra mesa, su sabor delicado y su textura le convierte en una fruta excepcional. Solo un consejo, cuidado con las manchas en la ropa, son difíciles de eliminar.